El Sector Construcción en Venezuela tuvo su más alto aporte al PIB del país en el año 2012, a partir de ese año nos fuimos a pique, números que jamás volveremos a ver si continua la migración, el hecho es que no existe demanda, la infraestructura de Venezuela le quedo grande ya para la población y la economía que maneja.
Al sector actualmente solo aportan pequeñas excepciones que se presentan en contadas Ciudades del país, son inversiones impulsivas que no responden a ningún tipo de análisis económico y del entorno, el mercado inmobiliario está saturado de oferta, lo que hace que los valores de mercado no se correspondan a lo que realmente cuesta construir.
La falta de crédito bancario, es factor clave que impide que el sector construcción pueda por lo menos dejar de decrecer. Si la población no dispone de estos recursos, simplemente los inmuebles bajaran hasta que alguien pueda pagarlo de contado, y los financiamientos propios, son montos altos y en un muy corto plazo.
Los mercados inmobiliarios que mejor responden son los de las capitales de los principales estados, ya que los que se decidieron quedar, migran internamente hacia esas ciudades y con preferencia a Caracas, esto debido principalmente a las pocas fuentes de trabajo disponibles y medianamente pagadas, y en segundo término también por los servicios públicos, los cuales presentan menos fallas.
El mercado de inmuebles vacacionales, en ciudades o zonas turísticas de Venezuela se cotiza en precios irrisorios, mantener un segundo inmueble junto a los costos de viaje no los hace atractivos para sus dueños por lo que la oferta es variada y muy grande. Un punto negativo para estos tipos de inmueble es que los costos de condominio no son pagados a tiempo, lo que acelera la depreciación de los conjuntos por falta de mantenimiento.
El sector inmobiliario comercial está en la constante búsqueda de los pocos actores que se mantienen en el mercado, ofreciendo condiciones antes impensables, los dueños de centros comerciales quieren mantener a flote sus inmuebles con inquilinos que por lo menos paguen el condominio para que su inversión no se desvalorice y se mantenga vigente en la mente del usuario.
Todo esto puede sonar negativo y pesimista, sin embargo es la realidad, también en tiempos difíciles se crece, si ves a futuro, un futuro sin apuros o ansiedad, es momento de invertir en propiedades que su revalorización sea alta, ya que sus precios actuales no representan en ocasiones el valor del terreno. Son inversiones para que futuras generaciones puedan aprovechar, puedan hacer nuevamente inmuebles productivos y de valor.
Arquitecto, con Maestría en Gerencia de Proyectos, Empresas Constructoras e Inmobiliarias. Scrum Master. Profesional activo del Sector AEC especializado en Construcción de Centros Comerciales y Hoteles, experiencia por más de 650.000 m2 (7 millones sf) proyectados y construidos.